Por su capacidad biodegradable, los oleoquímicos a base de aceites vegetales
han incrementado su demanda y los fabricantes de diferentes sectores están
estudiando los beneficios económicos que representan, porque cumplen con
los requerimientos técnicos y la ventaja de ser materiales que se integran con
facilidad al medio ambiente.
La demanda de oleoquímicos se ha expandido conforme los fabricantes de muy diversos
productos solicitan este tipo de materiales que han resultado ser muy eficientes
porque cumplen con las normas ambientales, son biodegradables y tienen un precio
competitivo. Al tiempo que el concepto de sustentabilidad gana importancia, las
compañías están más conscientes de la necesidad de demostrar el uso de materiales
renovables que de todos los materiales renovables, los oleoquímicos “verdes” son
los más económicos, prácticos y versátiles.
Sin embargo, todavía existen algunas dudas acerca de qué tanto es el prestigio de
estos productos que se fabrican con aceites y grasas vegetales para la conservación
efectiva del medio ambiente y cuánta es la presión que existe para la venta de productos
que se fabrican con estas materias primas que deberá resolver la controversia
granos o combustibles.
La crisis económica mundial del 2008 - 2009 redujo la demanda de oleoquímicos en
Europa y en Norteamérica; mientras que, durante este mismo periodo, las ventas de
estos productos crecieron en países de economías emergentes de Asia. Y, aunque las
ventas de oleoquímicos derivados de aceites vegetales decayó durante todos esos
meses, los niveles de ventas nunca estuvieron por debajo de materiales derivados
de la petroquímica.
“La demanda de oleoquímicos en los sectores industriales
ha sido un éxito, especialmente en la industria automotriz
y para los mercados que procesan metales”, señaló
Simon Llaythornthwaite, director en Europa de Cognis
AG, con sede en Düsseldorf, Alemania, una de las empresas
productoras de oleoquimicos más importantes.
“Empezamos a ver signos de recuperación de estos
productos entre compañías que están interesadas en
mantener el equilibrio ambiental, que en un futuro no
muy lejano, serán parte de la solución a la contaminación
ambiental, emisión de gases invernadero y reducción
de los efectos del calentamiento global; por esta razón,
serán los productos de mayor preferencia para el consumidor”,
prosiguió Lalythornthwaite.
Mientras la demanda de oleoquímicos siga en expansión,
los requerimientos entre las compañías para adquirir
estos productos serán aceptados porque cumplen con
los mismos requerimientos de los materiales derivados
de petróleo, un precio competitivo y menor impacto ambiental,
lo cual indica que serán mejor aceptados porque
cada vez hay mayor presión a favor de la ecología y para
encontrar soluciones frente al cambio climático.
IMPORTANCIA DE LOS OLEOQUÍMICOS “VERDES”
Las actitudes frente a los beneficios de los oleoquímicos
amigables con el medio ambiente han aumentado en todo
el mundo, en vista de que ya está comprobado que son
productos mucho más seguros, higiénicos o saludables
cuando se utilizan en el manejo de los alimentos, en productos
para el cuidado personal y en cosméticos.
“La conducta del consumidor con respecto a la compra
de oleoquímicos es similar en muchos países del mundo,
aún en áreas de mayor crecimiento como Asia”,
señaló Klaus Notinger, consultor de la firma OleoConsult,
con sede en Neuss, Alemania.
Como resultado a la influencia de los problemas ambientales
entre los consumidores, los fabricantes tienden
ahora a experimentar la aplicación de oleoquímicos
en una enorme variedad de productos para una gran
variedad de mercados.
Además de los segmentos para alimentos funcionales,
suplementos dietéticos y alimentos para animales, la
mayor aplicación para los oleoquímicos tiende ahora
hacia la fabricación de productos farmacéuticos, para el
cuidado personal, cosméticos, detergentes y productos
de limpieza.
La demanda es también relativamente alta en sectores
que requieren productos químicos que sean ecológicamente
seguros y no causen daños al medio ambiente,
que no sean bio-acumulativos y puedan desintegrarse
fácilmente. Estos segmentos incluyen auxiliares para
la protección de productos agrícolas, químicos para
los campos y las refinerías de petróleo, así como para
la elaboración de lubricantes. En algunos mercados,
conforme la legislación y normas ambientales se han
hecho más estrictas, las compañías prueban con mayor
frecuencia derivados de oleoquímicos paraaplicaciones
que requieren un mayor grado de biodegradabilidad.
Las nuevas regulaciones –y un mayor desarrollo, conocimiento
tecnológico y exigencia ambiental- ha permitido
la apertura de nuevos sectores que producen oleoquímicos
con base en aceites y grasas vegetales. Entre estos
sectores se encuentra la industria electrónica, textiles,
papel y plásticos.
La limitación de la legislación para reducir las emisiones
de compuestos volátiles orgánicos (VOCs) a la atmósfera,
generalmente emitidos por solventes a base de
petroquímicos, ha empujado la demanda de productos
más compatibles con la naturaleza y que sirvan como
base en la elaboración de barnices, recubrimientos,
pinturas y tintas para imprenta.
De acuerdo con la demanda de oleoquímicos que den
mayor fuerza a un mercado más estable, y en particular,
para nuevos mercados, los procesadores de productos
derivados de aceites y grasas vegetales tendrán que
demostrar que sus productos cumplen con las especificaciones
requeridas y que incluso, son mejores que
aquellos que se fabrican con base a petroquímicos. Al
mismo tiempo, tienen que trabajar a fin de llegar a un
precio competitivo.
Muchos consumidores están dispuestos a pagar un precio
más alto por productos a favor de la sustentabilidad y
que sean compatibles con el medio ambiente; por ejemplo,
en jabones y productos de limpieza que reduzcan los
niveles de contaminación del agua, el suelo y la atmósfera
y contribuyan a combatir el cambio climático, y de esta
manera se está en una situación de ganar-ganar.
Para los proveedores de derivados de oleoquimicos, la
mejor presentación es también la protección contra una
demanda que entre en un juego de volatilidad de precios.
Los vaivenes del precio de los aceites vegetales pueden
hacer cambiar a los consumidores hacia la adquisición de
productos derivados del petróleo. Sin embargo, esto no
sucede cuando los derivados de oleoquímicos ofrecen
mayor calidad para diferentes aplicaciones.
Existen importantes fluctuaciones en el precio de los
oleoquímicos; sobre todo, a partir de que los especuladores
empezaron a intervenir en el mercado. En consecuencia,
los precios, tienen a veces, un buen balance en
el mercado de suministro/demanda; pero en ocasiones,
los precios tienen un mayor impacto en la demanda.
En la actualidad, el mercado de oleoquímicos tiene la
misma volatilidad que los derivados de la petroquímica.
EL PODER DE LA INVESTIGACIÓN
Con el propósito de diversificar las posibilidades de los
productos, varias compañías especializadas en oleoquímicos
invierten fuertes sumas de dinero en programas
de investigación y desarrollo en donde participan científicos
de varias disciplinas en el desarrollo de nuevos
compuestos de oleoquímicos y sus aplicaciones.
Continúa la investigación y pruebas para
plásticos biodegradables
Las compañías trabajan intensamente en el desarrollo de
nuevas aplicaciones que sean renovables a fin de elevar
los perfiles de sustentabilidad de sus negocios y por ello,
están enfocando sus actividades de investigación y desarrollo
en el descubrimiento de las formas de incorporar
oleoquímicos en muchos productos. La recesión ha
brindado la oportunidad para que las compañías tengan
más tiempo para probar las nuevas formulaciones con
un gran capacidad de renovación. Se realizan pruebas
con nuevos materiales; por ejemplo, en el sector de
automóviles, con biocombustibles y con productos
elaborados con aceite de soya y otros renovables tendientes
a reducir las cantidades de materiales derivados
de los petroquímicos en estos vehículos.
La investigación también está abriendo nuevos nichos
para oleoquímicos. Aunque se desarrollaron hace varios
años, ahora se perfeccionan y se prueban nuevas tintas
con base en aceite de soya y algodón para la industria
editorial y para impresoras. La compañía sugiere que
la elaboración y prueba de estos productos no sólo
responde a una inquietud por disminuir la emisión de
contaminantes sino que también fortalece la eficiencia
de otras industrias y la agricultura local.
En el segmento de tratamiento de aguas residuales,
EOS Remediation Inc., con sede en Raleigh, North
Carolina, ha desarrollado una emulsión que se fabrica
con aceite de soya y que ayuda a limpiar los efluentes
de agua contaminada.
Los programas de investigación y desarrollo también
están enfocando su actividad en la aplicación de algunos
tipos de aceites vegetales que tienen ciertas propiedades
para el desarrollo de biomateriales.
El aceite de ricino (castor oil) es un producto de gran interés
para investigaciones recientes que están llevando
a cabo compañías químicas que han reconocido una vez
más, la versatilidad de estos materiales por su perfil único,
rico en ácidos grasos. Alrededor del 90% del contenido
de estos ácidos grasos son un compuesto de ácido ricinoleico,
el cual pertenece al grupo de los hidroxilos que
presentan doble enlace a lo largo de toda la cadena de
carbonos, los cuales son químicamente muy versátiles y pueden utilizarse de muy diversas formas. El aceite de
ricino es, de hecho, la materia prima más común de origen
natural de ácidos grasos del grupo de los hidroxilos.
Una de las aplicaciones más importantes del aceite de
ricino como materia prima es para la producción de polioles,
una sustancia intermedia que se usa en la fabricación
de polímeros de poliuretano. Un número considerable
de compañías químicas, como BASF, DM y Arkema han
desarrollado poliamidas o nylon derivados del aceite de
ricino.Cuando se considera la el círculo de vida total, el
ahorro en emisiones de CO2 por el uso de poliamidas con
base de aceite de ricino se elige esta sustancia en vez de
los poliamidas derivadas del petróleo.
No obstante, el aceite de ricino es también un ejemplo de
posibles problemas que pueden surgir en la estabilidad
de los suministros, que pueden estar dentro del futuro
de los aceites vegetales. Gran parte del aceite de ricino
se produce en India en donde existen riesgos en cuando
a posibles rompimientos en la cadena de suministro.
EL TEMA DE LAS REGULACIONES Y EL USO DE LA TIERRA
En la Unión Europea, las restricciones al comercio de
cultivos GM ha limitado el desarrollo de nuevos oleoquímicos
con base en aceites y grasas vegetales. En el laboratorio
se han desarrollado derivados de oleoquímicos
muy interesantes; no obstante, la investigación prácticamente
está detenida en vista de que encontramos toda
suerte de problemas con la disponibilidad de materias
primas que, en última instancia, repercuten en el precio
y la comercialización de este tipo de productos.
El reciente incremento en el mercado de grandes cantidades
de glicerina, porque es un sub-producto de la
producción de biodiesel de aceite de soya, ha estimulado
la investigación para el desarrollo de nuevas aplicaciones
de la bioquímica. En adición a las aplicaciones tradicionales
en alimentos, farmacéuticos, productos para el
cuidad personal y para industrias de productos como los
polímeros, se está utilizando como ácidos grasos para la
elaboración de metil-ésteres, surfctantes, emulsificantes
y polioles de muy diversa aplicación en productos
de consumo diario.
Jabones biodegradables más eficientes
En particular se está desarrollando con derivados de la
glicerina, alternativas para forrajes que se fabrican con
petroquímicos como son los compuestos químicos
propileo glicerol y epicloridin.
Sin embargo, una vez que lleguen al mercado de productos
químicos, tendrán que competir con eficiencia
en la aplicación y el precio.
En vista de los límites para el uso de tierras, la escasez
de agua y la limitación de otros insumos para la agricultura,
probablemente la glicerina, un sub-producto
de los biocombustibles, no tendrá suficiente aplicación
mientras se puedan producir otros oleoquímicos a gran
escala. Además, la producción de grandes cantidades
de bio-químicos se verán restringidos por la ruta de la
biotecnología.
Hay muchos avances tecnológicos para procesar aceites
vegetales, más todavía no hay tecnología suficiente
para competir con los derivados de la petroquímica. En
consecuencia, los oleoquímicos de aceites vegetales
continuarán con una producción menor en el mercado
de productos químicos. No obstante, las tasas de crecimiento
en la demanda de oleoquímicos de aceites
vegetales se encuentran a niveles semejantes a la de
los derivados de la petroquímica; en especial, en algunas
regiones de Europa, Estados Unidos y Canadá, y con
crecimientos muy significativos en Australia y países
de Asia.
*Sean Milmo. Colaborador independiente de Oils and Fats International.
Growth in Green Oleochemicals. Oils and Fats International,
Brighton, UK, Jan. 2010, Vol. 26 No. 1, pp. 30-31.