Portal ANIAME

Eliminación de arancel a la importación de aceites Programa de Certificación de Calidad ANIAME Revista ANIAME Mensajes del presidente Reportajes Economía Tecnología Salud y nutrición Commodities Medio ambiente Seminario Notas de aceite Cultura Libros Crónica Entrevistas Mercados Datos Técnicos ACEITE DE PALMA Esquema del proceso de aceites comestibles Apéndice Calidad Biotecnología
Buscar
Búsqueda avanzada
El pronóstico del clima
 

Biotecnología


Falleció el Dr. Norman Borlaug, padre de la “revolución verde”

Por
Jun 21, 2010, 12:40

En su casa de Texas, el pasado 12 de septiembre falleció a los 95 años el Dr. Normam Ernest Borlaug, padre de la ‘revolución verde’ y la agricultura moderna, resultado de las investigaciones que realizó en México y que rindieron sus frutos en todo el mundo, liberándolo de graves hambrunas, lo que le valió ganar el Premio Nobel 1970.

Convencido de que “no habrá paz en el mundo con los estómagos vacíos”, Norman Borlaug, doctor en Patología Vegetal, realizó importantes innovaciones en el campo de las semillas híbridas y defendió la investigación como único medio para reforzar la producción de alimentos.

Durante toda la pasada década luchó en defensa de la biotecnología agrícola, alternativa real y muy eficiente para combatir el hambre, así como en proyectos para aliviar la pobreza. Comenzó la investigación en productos fitosanitarios en su época universitaria, pero no fue sino hasta 1944 ya en México, donde inició su trabajo con el desarrollo de híbridos del trigo y del maíz.

Entre 1964 y 1982 dirigió en México el Centro Internacional de Mejora del Maíz y el Trigo (CIMMYT), donde gracias a sus descubrimientos se logró crear varias especies capaces de multiplicar la producción de cereales hasta hacer autosuficiente a un país hambriento.

Conocido por sus logros como el ‘cerebro de la revolución verde’, los países que aplicaron su teoría en los años posteriores a 1975 consiguieron buenas cosechas, y naciones tan extensas como la India, Pakistán, Bangladesh y Turquía incrementaron aproximadamente en un 250% los rendimientos por hectárea.

En 1975, el científico declaraba: “Hay que dar a la agricultura y la ganadería prioridad de inversión sobre todos los demás sectores. Si hay cooperación mundial, la humanidad no pasará hambre”. (Fuente: El País).

Enviar por e-mailVersión para imprimir