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Feb 10, 2009, 14:27

 

GRABADO - RECONOCIMIENTO

 

Almazara española del siglo XVI. Grabado anónimo. Imagen del reconocimiento otorgado a los conferencistas y pioneros de la industria aceitera mexicana. Impresión especial para ANIAME en los Talleres del Grupo Arteria con papel 100% de algodón. Es de hacer notar que el algodón (Gossipium barbaense L.) es una planta autóctona de México y un importante cultivo varios siglos antes de la conquista para la obtención de fibra textil. La semilla del algodón fue la primera materia prima que se utilizó para la elaboración de aceite comestible y pastas proteínicas en nuestro país durante los primeros años del siglo XX.

 

A continuación, presentamos el texto de los reconocimientos y la medalla conmemorativa del quincuagésimo aniversario de ANIAME.

 

Nunca dudemos de la capacidad de un grupo de personas organizadas y con un proyecto bien intencionado para cambiar el mundo; pues además, es lo único que siempre hemos tenido. (1960)

 

Margaret Mead

Antropóloga norteamericana.

 

El aceite vegetal en España y México

 

El pan, el vino y el aceite fueron el centro de la dieta Europea; mientras que en Mesoamérica, la trilogía maíz-frijol-calabaza y las semillas oleaginosas constituían la base de la alimentación. No obstante, a partir de la Conquista en 1492 y el inicio de un enorme intercambio de materias primas y alimentos: ya nada fue igual.

 

México exportó a España maíz, cacao, algodón, girasol, cacahuate y aguacate; por su parte, España exportó a México almendra, piñón, avellana, nuez, junto con los famosos ultramarinos, entre los que destaca el aceite de oliva, un estanco exclusivo de la Corona que prohibía el cultivo del olivo en tierras americanas, de tal manera que este aceite estuvo reservado para las élites y para la unción de los santos óleos.

 

Es difícil reconstruir las técnicas y usos en torno al aceite en una fase histórica tan amplia y tan compleja; sin embargo, el Antiguo Testamento, los recetarios árabes, los vestigios de las almazaras (molinos de oliva) y los grabados, son fuentes de información de gran valor para conocer las primeras técnicas en España para la extracción del aceite, los usos y la enorme cantidad de platillos que hoy son comunes en ambos países.

 

El grabado que aquí presentamos, anónimo y probablemente del siglo XVI ilustra una típica almazara de Andalucía, en uso hasta fines del siglo XIX, en donde aparece un enorme rollo de granito que era movido con mulas, hombres o tracción hidráulica. La oliva, recién cortada de noviembre a diciembre en los olivares cercanos, era triturada por una enorme piedra para obtener el “mastrijo” o masa, que posteriormente se repartía sobre los “capachos” de la impresionante prensa compuesta por una viga de madera de hasta casi 12m de largo. El aceite corría directamente a unos pozuelos dispuestos bajo el suelo y se efectuaba entonces el proceso de decantación natural; es decir, la separación entre el aceite y el agua vegetal o “alpechín” para obtener el aceite de la primera presión en frío que se almacenaba en alcuzas o jarras de terracota. En la segunda prensa, idéntica a la primera, se efectuaba la segunda presión, esta vez con calor, para obtener un aceite que se utilizaba para fabricar jabón o como combustible para las lámparas.

 

PIEDRA DE LOS SOLES

 

 

 

Medalla conmemorativa del 50 Aniversario de la Asociación Nacional de Industriales de Aceites y Mantecas Comestibles, A. C., elaborada en plata pura onza-troy Ley .999 por la Casa de Moneda de México. La moneda “Piedra de los soles” fue elegida en mayo de 2008 por la 25 Conferencia Mundial de Directores de Casas de Moneda como la más bella del mundo. La pieza original es de plata, un kilo de peso, valor nominal de $100.00 M.N. y forma parte de la serie Precolombina que emite el Banco de México desde 1992, año conmemorativo del V Centenario de la llegada de los Españoles a tierras americanas.

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